Podemos
observar que en cualquier ciudad hay un gran número de peluquerías, y todas
tienen gente, pero es un sector en el que es muy fácil perder un cliente. Para
la mayoría de las mujeres su pelo es bastante importante y no nos gusta
confiárselo a cualquiera, por eso vamos a la peluquería de toda la vida. El problema
viene cuando cambiamos de ciudad y tenemos que buscar otra a la que ir. En este
caso, acudimos a muchas antes de encontrar una que realmente nos guste. Aquí
está la oportunidad para peluquerías de conseguir nuevos clientes, cosa
complicada debido a la gran competencia.
Lo más
importante en este tipo de negocios es la atención. Si vas a cortar el pelo,
vas a pasar con la persona que te atienda cerca de una hora, por lo que tiene
que ser muy amable y capaz de entablar una conversación para que te sientas
cómoda y le puedas decir exactamente lo que quieres. Por otro lado, las chicas
y chicos que trabajen en una peluquería tienen que tener una buena imagen,
tienen que dar ejemplo de lo que son capaces de hacer, por lo tanto deben estar
siempre arreglados.
Se suele
decir que el cliente siempre tiene la razón, en este caso esto es especialmente
importante. Si a una persona no le gusta como la dejas no va a volver, asique
si se queja debemos intentar solucionarlo por todos los medios. El trabajo de
una peluquera me parece difícil por el echo de saber entender lo que te quieren
decir, habrá gente que se explique mal, o que al final no le guste lo que te
pidió, pero la culpa va a ser siempre de ella. En este caso podemos intentar
recomendar otra alternativa, pero al final hay que hacer lo que te pide aunque
sepamos que va a salir mal. También hay que tener especial atención con las
señoras que acuden a peinarse todas las semanas, ya que son realmente fieles.
En cuanto al
precio, yo recomiendo ponerlo en la media. No lo pondría muy barato, porque la
gente podría pensar que se trata de una academia o algo parecido y no se
fiaría. Tampoco lo pondría demasiado caro, porque realmente no sé que más se
puede ofrecer en una peluquería para merecer pagar más por ella, ya que los
productos tienen que ser siempre buenos.
Como para
todos los negocios que se dedican al consumidor final, voy a recomendar que las
peluquerías se sitúen en el centro de la ciudad, ya que es la mejor forma de
que te conozcan. Tiene que ser un local bonito y moderno, ya que como ya he
dicho la imagen en es muy importante, y además debemos tener muy en cuenta la
limpieza. Hay que estar continuamente limpiando, ya que el pelo, la cera, y
otros productos que se usan manchan mucho.
Por último,
nos queda la promoción. En este sentido lo más fácil son las redes sociales, ya
que si todos vuestros clientes os dan un “me gusta” todos sus amigos lo verán,
por lo tanto decidles que lo hagan. Hay que tener en cuenta, que las redes
sociales requieren de un tiempo extra, ya que debemos tenerlas actualizadas y
contestar a todo lo que nos pregunten.
Por otro
lado, una peluquería tiene servicios baratos, como puede ser una manicura, que
puede regalar durante un periodo de tiempo para ganar clientes. También he
visto peluquerías con tarjetas de fidelización, con la que podías acumular
puntos y luego canjearlos por servicios.
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